La figura del Corredor Público ha existido desde hace varios siglos, prácticamente cuando surge la actividad comercial también nace la figura del corredor público como un auxiliar de comercio; esto es que dicha figura se da de manera natural en las civilizaciones Griegas, Fenicias, Romanas, y Egipcias, ya que al momento de realizar un acto de comercio las partes requerían de tener seguridad y certeza jurídica.
En México la figura del Corredor se presentó en el periodo de la Conquista, cuando Carlos V en el año de 1527 instituyó el oficio de Corredor. Posteriormente en el México independiente, se establece la figura del Corredor en el Código de Comercio de 1854, y continuó hasta el actual Código de Comercio (publicado en el Diario oficial de la Federación del 7 al 13 de Octubre de 1889), correspondiéndole el Título Tercero Romano denominado “De Los Corredores” (artículos 51 a 74); sin embargo estos artículos fueron derogados al entrar en vigor la nueva Ley Federal de Correduría Pública.
La nueva Ley Federal de Correduría Pública, fue publicada en el Diario Oficial de la Federación el 29 de Diciembre de 1992, entrando en vigor el 28 de Enero de 1993.